Te alabo, oh, Padre misericordioso, porque has revelado a los pequeños los tesoros infinitos del Corazón de tu Hijo.
Te pido que, por intercesión de la Beata Clelia Merloni, abandonada totalmente en el Corazón de Jesús, fervorosa en la caridad, paciente en la adversidad y heroica en el perdón, yo pueda obtener la gracia que ahora te pido.
Sagrado Corazón de Jesús, en Ti confío
Imprimatur † Mons. Giuseppe Tonello
Vicariato di Roma, 12/5/2020